Con Diseño Divino - La Semana del 31 de Deciembre

Con Diseño Divino

Alegría, más allá de diciembre

De la Palabra de Dios: “Pero el ángel les dijo: ‘No tengan miedo. Miren que les traigo buenas noticias que serán motivo de mucha alegría para todo el pueblo. Hoy les ha nacido en la ciudad de David un Salvador, que es Cristo el Señor’” (Lucas 2: 10-11).

¿Te has percatado alguna vez de que las noticias en los medios casi nunca son buenas? Los periodistas andan tras historias tristes, horrendas o por lo menos sensacionales, para así captar la atención del público. El pronóstico del tiempo también casi siempre suena negativo: Cielo parcialmente nublado, 30% de probabilidades de lluvia. ¿Por qué no decir mejor: cielo parcialmente soleado y 70% de probabilidades de sol?

La realidad es que, a pesar de todo esto, no nos gusta recibir noticias malas ni tristes. Y en la primera Navidad el ángel del Señor se aseguró de que su audiencia, los pastores, entendieran que la noticia que estaba a punto de darles no era como ninguna otra que hubieran recibido jamás, esta sería una noticia que les provocaría “mucha alegría”.

Aquella noticia era buena “para todo el pueblo”. Por años la habían esperado. Algunos quizá hasta se dieron por vencidos y ya ni se acordaban. Estoy completamente segura de que esos pastores, cuando salieron de su casa a trabajar, lo hicieron como cualquier otro día, pensando que sería una jornada común y corriente luego de la cual regresarían cansados y sin mucha alegría. ¡Cuál no sería su sorpresa!

¿Te provoca a ti alegría pensar en el nacimiento de Jesús? ¿Alegría más allá de los regalos y las festividades? Diciembre ya termina, y con él la etapa de la Navidad. Pero la alegría que Jesús vino a traernos no es para una temporada ni durante una celebración especial. Es gozo para siempre.

Los problemas de aquellos pastores, y por consiguiente los nuestros, no se acaban el día en que conocemos a Jesús. La tristeza que nos provocan las enfermedades, la muerte, las tragedias, tampoco se acaba. Entonces, ¿cómo podemos decir que el corazón de la Navidad es gozo?

Quiero invitarte a leer las palabras de Nehemías, un líder extraordinario que Dios usó en Israel: “No estén tristes, pues el gozo del Señor es nuestra fortaleza”. El gozo que se hizo realidad en la primera Navidad fue el gozo del Señor, se vistió de carne y hueso para nacer en un pesebre, que lo clavaran en una cruz y luego vivir en nosotros —cuerpos de carne y hueso también; defectuosos, con problemas, con tristezas—, para darnos una alegría indescriptible e incomprensible en medio de las más grandes angustias. ¿Que no sufrimos? Claro que sí, pero lo hacemos con esperanza, con paz y con la fortaleza que produce el gozo de conocer a Dios y de saber que nuestras vidas están en sus manos, nuestro futuro asegurado en la eternidad.

La verdad es que los chocolates, las galletas, los juguetes y demás regalos se acabarán, perderán su encanto o quedarán olvidados, pero una relación con Jesucristo es un regalo, una alegría, que durará por todas las Navidades y mucho más allá.

Te deseo un muy bendecido 2015,

Wendy

Para conocer más sobre el diseño de Dios para tu vida, te invito a visitarme en wendybello.com. Podemos conectarnos también en FacebookTwitter

Originally published Wednesday, 31 December 2014.

SHARE